EL RELOJ DE ARENA EN LA MASONERÍA

Aunque se estima que su uso es muy antiguo, no hay evidencias precisas sobre su origen. La primera evidencia concreta sobre la existencia de los relojes de arena se puede encontrar en una pintura de Ambrogio Lorenzetti que data del año 1338.
Existieron en distintas épocas, de diversos tamaños y modelos, e incluso se construyeron algunos tan grandes que eran capaces de medir un día entero. En la época colonial se usaban mucho los relojes de arena.
Algunos afirman que los romanos los usaban durante la noche, o que también los pudo haber inventado un monje francés para medir los tiempos
de meditación. También se los relaciona en los tiempos de los faraones. Siempre ha servido para  medir periodos de tiempo de una determinada tarea, ahora ha quedado en desuso por la sociedad moderna y se lo encuentra como adorno en los hogares.
Pintura de Lorenzetti
En la masonería este singular artefacto, se encuentra en el cuarto de reflexiones, donde cambia sustancialmente la razón de su presencia. Como parte de los utensilios de la ceremonia de iniciación, y forma parte del ritual masónico.
El Reloj de Arena simboliza el flujo inexorable del tiempo, la consumación de un ciclo, pero también la posibilidad de inversión del tiempo, del regreso al origen. En ese momento al fijarse en el reloj de arena, nos lleva a ver en él que se va acabando el tiempo que queda de vida, y que al escribir el testamento masónico lo hace ver que todo llega a su fin, pero queda en uno notar que puede comenzar otra vez ese ciclo, pero esta vez el camino del iniciado.
Si le damos un mayor simbolismo, se puede decir que también representa Lo vacio y lo lleno, lo superior y lo inferior (es decir el Cielo y la Tierra) se suceden, viene a representar la correspondencia entre lo de arriba y lo de abajo, el pasado y el futuro. 
Cuando se inicia el ciclo de deslizamiento de la arena, el paso parece lento, como pausado, y el movimiento parece ir en aumento. Nos viene a mostrar que la existencia humana, con su ritmo biologico, también sufre el mismo proceso de aceleración en la vejez. 
Cuando somos muy jóvenes el tiempo transcurre lentamente, pero a medida que nos hacemos más viejos, el tiempo sufre también este aparente proceso de aceleración.
Los dos compartimentos del reloj de arena nos pueden quedar como símbolos del cielo y la tierra, y el hecho que sean indistintamente parte superior e inferior, depende de la voluntad o necesidad del hombre.
El pequeño canal que une o separa ambos compartimentos, nos vendría a simbolizar la puerta estrecha por la que es necesario pasar, para experimentar más tarde un desarrollo espiritual; viene a ser la puerta estrecha por la que se efectúan los intercambios, el "Polo de la Manifestación".
El comentario final, es que en algunas ceremonias de iniciación, dependiendo del rito que se practique, este elemento no existe, y en otros casos este reloj de arena ha sido reemplazado por un simple dibujo en un papel, negándose la vivencia de experimentar ver un reloj de arena en forma real y el sentir del recipiendiario. Las razones en su mayoría se debe a que estos relojes no son fáciles de encontrar y si los hay ahora, son hechos con un alto valor de venta como adorno.
Como otro dato curioso, debido a que en la estación Concesión de la Palabra, hay hermanos que dedican excesivo tiempo en dirigir la palabra, saliéndose en muchos casos del tema central, es que en el sitial del Venerable Maestro se tiene un reloj de arena de tres minutos para que el hermano locutor de turno no se exceda en su tiempo. 
 
DATOS CURIOSOS .- Relojes de arena más grandes del mundo

Existe en Moscú, uno de los relojes de arena más grandes del mundo, de 12 metros de alto y que fue construido por una marca de autos como publicidad en el 2008.
En Budapest existe lo que podría ser el reloj de arena que más tiempo demora en vaciarse en el mundo, tomándole un año entero para drenarse completamente.
Literalmente siendo una rueda gigante diseñada para marcar el tiempo, la instalación pública fue construida en 2004 para conmemorar la inclusión de Hungría en la Unión Europea. La rueda gigante es ligeramente cóncava, inclinada hacia el punto central de obturación que marca los depósitos de grano superior e inferior. En el caso de la Rueda del Tiempo, las partículas que caen para marcar el paso del tiempo son pequeñas piezas de vidrio que gotean a través del reloj con la ayuda de un sistema computarizado que mantiene la perfecta sincronización. Tanto los depósitos superior e inferior se pueden ver a través de grandes paneles triangulares de vidrio en la rueda. Cada 31 de diciembre un equipo de cuatro personas utilizan cables de acero grueso para girar la Rueda del Tiempo 180 grados sobre su base en rieles, reseteando la monstruosidad cronológica por otro año. Incluso con múltiples asistentes el proceso puede tardar hasta 45 minutos para completar la media rotación. La instalación se encuentra en un parque público y los visitantes pueden venir y tratar de volcar la titánica rueda de granito por sí mismos, lo cual es pues, imposible.























Ivo Pino Ramos
2008-08-01_bmw_1.jpg
30/06/2021

No hay comentarios:

Publicar un comentario